Como grupo pastoral juvenil de la Parroquia del Carmen la invitación a participar en “L’Aplec de l’Esperit” fue una noticia muy atractiva en todo sentido, porque venia a impulsar intereses, compromisos y organización dentro del grupo, además de la preparación y participación de éste.
Dentro de la organización decidimos que los temas a estudiar previa a la actividad fueran rifados, con el compromiso de preparar cada tema para el resto del grupo. Es así como se dio en las reuniones de los viernes de cada semana un tema diferente donde los exponentes propiciaban la participación e intervención de todas y todos las miembros del grupo. El último tema “la Vocación” fue una experiencia de retiro en una casa de las clarisas en Montblanc que hoy es un casa de encuentros del seminario de "El poble de Déu." Ahí tuvimos la oportunidad de comer con con el arzobispo de Tarragona, Mons, Jaume Pujol, quien nos habló del tema de la vocación, y con el Padre Pere.
Y llegó el día del encuentro en Terrassa. Comentábamos entre nosotros/as “qué privilegio el nuestro” poder participar en “L’Aplec de l’Esperit”. En el autocar ensayamos el canto del encuentro: “Amb vosaltres cada dia” que, además, era el lema de la Jornada. Tan pronto llegamos a Tarrasa, después de inscribirnos, nos dirigimos a la plaza central donde escuchamos, cantamos y hasta bailamos el himno de “L’Aplec”. Escuchamos las palabras de bienvenida de parte del señor obispo y demás autoridades y vimos unas danzas tradicionales, con esta atmósfera de alegría nos trasladamos a nuestro siguiente destino en un cercano a Terrassa. Allí tuvimos la oportunidad de compartir con una familias que nos atendieron y compartieron con nosotros y nosotras donde reconocimos la importancia de “dar con el corazón contento y las manos abiertas”. La sencillez y el espíritu de servicio de las familias fue un gesto que guardaremos siempre en nuestro corazón.
Luego de esta experiencia, nos reunimos todos los grupos en la iglesia del pueblo. Ahí abonamos una experiencia más; compartimos por medio de una dinámica con el resto del grupo, escuchamos tres testimonios y tuvimos un momento de oración muy especial en la iglesia. Con fuerzas espirituales y físicas renovadas nos trasladamos al parque de les Sensacions de Vallparadís, en el centro de Terrassa, donde celebramos la misa. La solemnidad de la procesión de los sacerdotes con la Cruz de las Jornadas Mundiales de la Juventud y i el Icono de María impregnó una atmósfera de acogida del Espíritu Santo. Hacia el final de la misa la hermana Glenda nos sorprendió y captó la atención con un canto. Todos nos veíamos y en verdad estábamos emocionados.
La misa terminó con momento de fotos y recuerdos; y… a esperar el concierto final donde recuerdo que fue un momento de jubilo y de compartir con todos mis hermanos y hermanas. No importaba al lado de quien estábamos; lo importante era celebrar juntos y juntas “L’Aplec de l’Esperit” impregnados de ese sentimiento de compartir y celebrar. Partimos con el corazón rebosando de alegría, con el compromiso de que este fuego dado no se apague sino que esté con nosotros cada día.
Pedro Hueso